Los nombres “Línea 2 Vodafone” y “Estación Vodafone Sol” permanecerán en la cartelería y planos de la Comunidad de Madrid desde comienzos de septiembre hasta dentro de tres años.
Lo cierto es que este contrato, que reportará 3 millones de euros, no presenta ningún beneficio para los usuarios de Metro. La publicidad de grandes empresas en el interior de infraestructuras públicas tiene como justificación la falta de financiación que, a su vez, se encuentra en el origen de una escasa apuesta por el transporte público en la Comunidad de Madrid.
Según datos de Ecomovilidad, a cambio de 83.000 euros mensuales, Vodafone conseguiría una cantidad enorme de impactos, ya que el 100% de los viajeros del metro tendrán contacto con el logo: eso son 1.500 millones de viajes anuales, y muy especialmente los que pasen por la estación de Sol (65.000 viajeros diarios) o la línea 2 (122.000 diarios). A esta cifra hay que añadir todos los que consulten los millones de planos impresos, la aplicación móvil o la página web.
Así, vemos de nuevo la entrada progresiva de grandes empresas privadas dentro de servicios públicos, en una dinámica que tiene su explicación en la mercantilización y privatización de los mismos.
¿Transporte público, gratuito y de calidad? En la UE no es posible
No hay comentarios:
Publicar un comentario