Los estudiantes nos enfrentamos en la Comunidad de Madrid a una nueva amenaza de subida de las tasas universitarias, esta vez en torno al 20%. Los gestores del capital a nivel regional planean con esta medida “recortar” 55 millones de la educación pública agrandando el problema de los de 30.000 estudiantes que están al borde de la expulsión en todo el país.
No hace falta remontarse mucho tiempo atrás para ver las consecuencias de los planes privatizadores de nuestra educación. Ya a finales del presente curso 2012/2013 hemos visto como tres mil estudiantes universitarios se veían ahogados por la subida de tasas que se produjo a principios de curso, cifrada en un 66%. A esta subida de tasas habríamos de sumar los recortes en becas para el mismo curso, así como los ataques a otros sectores de la comunidad educativa, muy bien reflejados en el sector de la limpieza, que tras una dura batalla consiguieron una importante victoria parcial.
De nuevo nos enfrentamos a una amenaza de subida de tasas para el próximo curso, así como un proyecto de reforma del sistema de becas, que a día de hoy, con un sueldo medio cifrado en 15.500 euros, con más de seis millones de parados, y con muchos trabajadores bajo amenaza de despido y sin convenios colectivos, las familias trabajadoras de nuestro país no pueden hacer frente. Esta nueva medida sólo conseguirá, y bien lo saben quienes la promueven, acabar con la universidad pública y alejar a los hijos e hijas de la clase trabajadora de la universidad, condenandonos a la falta de formación y la precariedad. Esta subida de tasas se hará efectiva en el momento de su aprobación definitiva a todos los estudiantes, incluyendo aquellos que realicen su matricula de forma previa a su aplicación. A estos estudiantes se les pasará el precio de las matriculas del año anterior y posteriormente un segundo pago en el momento en el que se apruebe oficialmente el "tasazo".
Los estudiantes de extracción obrera y popular no podemos permanecer pasivos frente a estos ataques directos contra nuestros derechos más fundamentales, no podemos permitir que la universidad sea cada día, de forma más evidente, un ancho terreno para que empresarios y banqueros obtengan altas tasas de beneficio a costa de nuestro trabajo o el de nuestros padres. Hace tiempo que los cantos de sirena que nos hablaban de excelencia demostraron ser completamente falsos, ya no nos sirve su excelencia, ni los “recortes” por la crisis, solo nos sirve la lucha constante e implacable contra un sistema que es incapaz de garantizar una educación para todos y todas. El objetivo de estos ataques está claro ya para la mayoría del estudiantado, acabar con la educación pública y expulsar a la clase obrera de la universidad, siguiendo con el proceso de elitización y privatización del sistema educativo en general y del universitario en particular.
Por todo esto la juventud comunista llama a construir en cada facultad verdaderos centros de resistencia frente a estos ataques. Solo mediante la organización, la unidad y la lucha desde la base de toda la comunidad educativa conseguiremos vencer en la batalla por la educación pública y una nueva sociedad.
En el pasado la clase obrera y los/as hijos/as de esta lucharon por el acceso a la universidad con todas sus fuerzas. Hoy la lucha se debe repetir, pero esta vez para conquistar una nueva educación pública, gratuita y de calidad al servicio de la clase obrera y el pueblo.
No hace falta remontarse mucho tiempo atrás para ver las consecuencias de los planes privatizadores de nuestra educación. Ya a finales del presente curso 2012/2013 hemos visto como tres mil estudiantes universitarios se veían ahogados por la subida de tasas que se produjo a principios de curso, cifrada en un 66%. A esta subida de tasas habríamos de sumar los recortes en becas para el mismo curso, así como los ataques a otros sectores de la comunidad educativa, muy bien reflejados en el sector de la limpieza, que tras una dura batalla consiguieron una importante victoria parcial.
De nuevo nos enfrentamos a una amenaza de subida de tasas para el próximo curso, así como un proyecto de reforma del sistema de becas, que a día de hoy, con un sueldo medio cifrado en 15.500 euros, con más de seis millones de parados, y con muchos trabajadores bajo amenaza de despido y sin convenios colectivos, las familias trabajadoras de nuestro país no pueden hacer frente. Esta nueva medida sólo conseguirá, y bien lo saben quienes la promueven, acabar con la universidad pública y alejar a los hijos e hijas de la clase trabajadora de la universidad, condenandonos a la falta de formación y la precariedad. Esta subida de tasas se hará efectiva en el momento de su aprobación definitiva a todos los estudiantes, incluyendo aquellos que realicen su matricula de forma previa a su aplicación. A estos estudiantes se les pasará el precio de las matriculas del año anterior y posteriormente un segundo pago en el momento en el que se apruebe oficialmente el "tasazo".
Los estudiantes de extracción obrera y popular no podemos permanecer pasivos frente a estos ataques directos contra nuestros derechos más fundamentales, no podemos permitir que la universidad sea cada día, de forma más evidente, un ancho terreno para que empresarios y banqueros obtengan altas tasas de beneficio a costa de nuestro trabajo o el de nuestros padres. Hace tiempo que los cantos de sirena que nos hablaban de excelencia demostraron ser completamente falsos, ya no nos sirve su excelencia, ni los “recortes” por la crisis, solo nos sirve la lucha constante e implacable contra un sistema que es incapaz de garantizar una educación para todos y todas. El objetivo de estos ataques está claro ya para la mayoría del estudiantado, acabar con la educación pública y expulsar a la clase obrera de la universidad, siguiendo con el proceso de elitización y privatización del sistema educativo en general y del universitario en particular.
Por todo esto la juventud comunista llama a construir en cada facultad verdaderos centros de resistencia frente a estos ataques. Solo mediante la organización, la unidad y la lucha desde la base de toda la comunidad educativa conseguiremos vencer en la batalla por la educación pública y una nueva sociedad.
En el pasado la clase obrera y los/as hijos/as de esta lucharon por el acceso a la universidad con todas sus fuerzas. Hoy la lucha se debe repetir, pero esta vez para conquistar una nueva educación pública, gratuita y de calidad al servicio de la clase obrera y el pueblo.
FRENTE
A LA SUBIDA DE TASAS EN MADRID,
ORGANIZACIÓN Y LUCHA ESTUDIANTIL
ORGANIZACIÓN Y LUCHA ESTUDIANTIL
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